Hay lugares a lo largo y ancho del globo que se han hecho famosos por ser verdaderos santuarios del terror, emplazamientos con un encanto especial para el visitante y que trasmiten sensaciones de misterio que superan a cualquier film de terror. Es el caso de la Casa/Hotel del Salto de Tequendama, situado en Colombia.
Se trata de un Hotel construido frente las cataratas del Salto de Tequendama, un lugar verdaderamente de cuentos en donde el agua cae por un acantilado de decenas de metros de altura.
Frente a este salto, el hotel se construyó en 1928 con un diseño clásico y funcionó durante varias décadas con bastante éxito, ya al pasar los años, este éxito menguó mucho, y acabo convirtiéndose en la práctica en un hotel para las personas que estaban por fallecer y querían hacerlo con tranquilidad. Además, como el hotel esta situado justo en un precipicio, se han alimentado muchas leyendas de suicidios en esta zona.
Ya en la década de los setenta, este hotel cerró sus puertas para siempre, lo cual haría que el edificio se deteriorase y fuera en cierto modo canibalizado por el paisaje, muy húmedo y en donde crecen a su merced moho y plantas salvajes.
Tras años de abandono, el aspecto de este lugar abandonado fue siendo cada vez más terrorífico. Sumando esto a la leyenda de los cientos de fallecimientos que allí se produjeron, fue llamando la atención de cualquier visitante, hasta el punto de convertirse en una atracción turística.
En la actualidad, este emplazamiento ha sido reconvertido en la Casa Museo Salto de Tequendama Biodiversidad y Cultura, un lugar que ha sabido mejorar los atractivos existentes y en donde además podremos disfrutar de exposiciones artísticas y actividades culturales. Todo ello manteniendo el encanto y el misterio de un edificio que es un emblema de una zona idílica.
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